Al igual que una comida deliciosa, Privia aporta paz y tranquilidad 

Asia Mei es la propietaria y chef de MOONSHINE 152, un restaurante en el área de Southie, el sur de Boston, en Massachusetts. Además de ser una cocinera fantástica, con su personalidad emprendedora logra que los clientes sigan volviendo día tras día.

"La gente podría pensar que estoy un poco loca cuando hablo de mi estilo de vida. MOONSHINE 152 lleva abierto casi nueve años y solo me he tomado 2 días libres del restaurante en todo este tiempo. Obviamente, ser propietaria implica papeleo del que hay que encargarse fuera del horario laboral, y los fines de semana también ofrecemos un servicio de brunch, además de cenas".

A pesar del horario tan exigente, Asia atribuye gran parte del éxito del restaurante a la dedicación del equipo que ha conformado. "Nuestro equipo es como una familia, todos estamos unidos y trabajamos con el mismo objetivo. Sacar lo mejor del talento de cada persona nos ayuda a conseguir un resultado colectivo positivo. Me siento muy agradecida con cada miembro de nuestro equipo".

Junto con su equipo de confianza, Asia trabaja duro para crear las delicias culinarias que sus clientes disfrutan a diario. Cree que la cocina y el arte tienen muchas cosas en común. "Empecé a crear arte durante la pandemia. Suelo usar un montón de colores en mis dibujos y cada uno de ellos tiene su propio significado que, al combinarse con los demás, crea una imagen colectiva. Es algo muy similar a cómo se elabora un buen menú. Contar con una actividad creativa como el arte ha aportado una nueva fuente de entusiasmo a mi vida".

Con un estilo de vida diario ajetreado, la música se ha convertido en un método de relajación clave para Asia. Nos habla de cómo la música le ha dado tiempo para ser ella misma.

"Solía tocar la batería, siempre me ha encantado la música. Hace más o menos un año, pensé en volver a tocar algún instrumento musical y acabé eligiendo el Privia.
El diseño compacto y minimalista no solo mejora la experiencia de interpretación, sino que también aporta una sensación de positividad y creatividad a mi vida, más allá de simplemente tocar un instrumento".

Asia también elogia con entusiasmo el diseño de Privia. "Soy una persona muy particular en cuanto a lo que tengo. No es solo el sonido y la sensación de comodidad al tocar, sentía que ningún otro instrumento podía expresar la elegancia tan bien. Al igual que ocurre después de tomar una comida deliciosa, el Privia me aporta un momento de paz y tranquilidad".